Los hermanos Girolami confirmaron su romance con el circuito de Río Cuarto con un triunfo que valió un campeonato para la familia. Sin dudas el autódromo del Imperio del Sur les cae bien y este domingo quedo confirmado. La comunión existente entre el circuito de Río Cuarto con el apellido Girolami es una combinación que se asemeja a éxito. El mayor de los hermanos logró, una vez más el triunfo largando desde la décima colocación. Tal como sucedió al principio de campeonato cuando nadie lo tenía en los cálculos y el “Bebu” apareció quedándose con la primera de las cinco victorias del año.
Pero hoy tuvo otro sabor. El contexto era diferente y el desenlace marcaba la historia de la categoría y de la vida de Franco Girolami. El mismo que después de la competencia de Mendoza veía alejarse las chances de pelear por el título. Pero el automovilismo le dio revancha y en La Plata revivió.
La competencia se puso en marcha con una dura batalla entre los dos principales postulantes al título. Franco Girolami y Agustín Canapino, que perdía la primera posición en el lanzamiento de la competencia.
“Bebu” logró un excelente avance en las primeras vueltas y de la décima posición de largada rápidamente saltó a la séptima y poco a poco fue avanzando hasta llegar a ser primero.
El equipo Lincoln Sport Group tiene el secreto. Lo guarda celoso y lo utiliza en el momento justo, y este domingo fue ese momento. Otra vez logró un gran trabajo en los boxes y a la hora de volver a la pista, Néstor no vio peligrar la primera posición obtenida a fuerza de manejo.
En la primera parte de la competencia, un roce entre Néstor Girolami y Martín Ponte en la curva dos puso en riesgo la definición de la competencia. Cuando la carrera finalizó los comisarios deportivos decidieron no modificar el clasificador final y “Bebu” pudo festejar.
Mientras la competencia consumía el tiempo estipulado de 55 minutos, la definición variaba con el correr de las vueltas. Por momentos Canapino se consagraba y por momentos lo hacía Franco Girolami.
El campeón 2017 hizo todo lo que debía hacer. Lucho, peleó y arriesgo en los momentos que debía hacerlo atacando la posición de Néstor Girolami pero no pudo doblegar la defensa cerrada que propuso el piloto cordobés de Isla Verde.
Franco se posicionó en la tercera colocación con Matías Rodríguez atrás para cuidarle las espaldas. Con estas posiciones el campeón era Franco.
Así se corrieron las últimas vueltas. Como se vivió la carrera final. La definición prometía ser apasionante, electrizante y no decepciono. El título voló en el aire y no definía para que lado caía, inclusive después de caer la bandera a cuadros.
Terminó la temporada 2018 de la misma forma en que se vivió todo el año. Con una definición apasionante que tuvo en vilo a los amantes del automovilismo que siguieron de cerca el desenlace de la competencia y la consagración de Franco Girolami por primera vez en el TopRace.
TEXTO: PAULINO HERNÁNDEZ / TOPRACE.COM.AR
FOTO: TOPRACE.COM.AR